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lunes, marzo 24, 2014

¡Ay mujer!

Guardo en relicario de madera
el collar de perlas 
que le da vida a tus labios,
dos cuentas de cristal traslucido 
que destellan cuando ríes,
cuatro notas musicales
de tu risa al mediodía.

¡Ay mujer que lejanas pareces tan mía!

Atesoro entre hojas de árbol
los días que en la memoria se fueron,
los pilares que te sostienen
cual sustento que alimenta el recuerdo.

¡Ay mujer que en la distancia te revelas!

Diosa que entreteje de momentos
el sueño de la justa recompensa
y allá donde estás,
como un pez al anzuelo
mi mirada se engancha a tu existencia,
se pierde, se embriaga en tu esencia,
te busca,
se entrega,
se embelesa:
¡ay mujer con toda tu grandeza!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Dejé de buscar el significado, y entonces entendí de que hablas... :)